TIC-TAC CUATRO CUENTOS Y UN SECRETO. ENTREVISTAMOS A SUS AUTORES

 

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Érase una vez un reloj, dos razones para adorar un cuento, tres malvados pelirrojos actuando, cuatro edificios más abajo, cinco cosas habituales en cualquier reloj, seis nidos, siete días de guardia, ocho ataques, nueve metros de escalera y, pasadas las diez de la noche, sus once escalones bajo la luna llena. Y doce golondrinas.

Mi abuelo era un gran relojero.

 

Para celebrar la salida al mercado Tic-Tac. Cuatro cuentos y un secreto el pasado 5 de diciembre, hemos querido entrevistar a sus autores, Diego Arboleda y Eugenia Ábalos, para que de primera mano nos descubran los secretos de una de las publicaciones más sorprendente de la LIJ en 2016.

 

Un libro publicado por la editorial Libre Albedrío (podéis recuperar aquí su contenido extra) que ya está comenzando a recibir críticas muy positivas en webs y blogs especializados, y que supone una formidable lectura de iniciación para los lectores más jóvenes de la casa en la literatura que abarca temas más complejos (la muerte) que los tradicionales valores que se presuponen a libros de esta naturaleza. Con Diego (D.A.) y Eugenia (E.A.) hemos charlado para bucear en su génesis y el proceso de su desarrollo.

 

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Tic-Tac. Cuatro cuentos y un secreto es un relato formado por cuatro cuentos que se entrelazan, y en los que los relojes y los segunderos son los protagonistas. ¿Cuál es la semilla de esta obra? ¿Por qué los relojes y por qué te decantaste por esta estructura tan poco habitual en la literatura para jóvenes lectores?

di D. A.: Los relojes, en especial los relojes antiguos, ejercen un gran poder de atracción. Pero además, cuando eres niño y no conoces bien su funcionamiento, tienen un componente misterioso. Alguien que es capaz de crear un reloj, que puede manipular esas diminutas ruedas dentadas… da la impresión de que puede construir casi cualquier cosa.

Esa estructura de cuentos en parte independientes y en parte relacionados le venía muy bien al libro que quería escribir. Los cuentos son las ruedas dentadas que de repente encajan y se hacen girar unas a otras.

Eugenia, no es la primera vez que trabajas mano a mano con Diego. ¿Es más fácil para un ilustrador plasmar en imágenes la obra de un compañero con el que ya ha trabajado, o cada obra es un punto de partida nuevo?

eu E.A.: Desde luego, al haber trabajado antes con Diego, se hace más fácil el trabajo por el conocimiento previo de la dinámica entre los dos. Así y todo tengo que decir que cada proyecto, independientemente de con quién lo trabaje, para mí es un punto de partida nuevo.

En el caso de Tic- Tac. Cuatro cuentos y un secreto ¿Cómo fue el proceso creativo de tus ilustraciones, y cuándo reconociste el camino que debías seguir en los trazados que acompañan a los textos de Diego?

eu E.A.: El proceso creativo de este libro lo realizamos en dos etapas. En la primer etapa tuve la oportunidad, que no siempre tiene un ilustrador, de poder realizar el diseño de personajes codo a codo con el escritor. De esta manera, Diego y yo fuimos moldeando el estilo artístico de todas las ilustraciones. En el caso de la técnica, es algo que decidí desde el primer momento: sería acuarela y lápiz de color.

 

 

Diego, sorprende mucho que más allá de los tradicionales valores que se exploran y fomentan en la LIJ encontremos temas tan imponentes (y adultos) como la muerte. ¿No da un poco de pánico intentar acercar estos conceptos a un público tan joven?

di D. A.: Yo quería tratar el paso del tiempo y, claro, cómo evitar la muerte. En realidad cualquier tema puede ser tratado en la LIJ, la prueba está en las bibliotecas. En sus estanterías descubrirás a autores que trataron los temas más espinosos y lo hicieron con mucho acierto. La cuestión es encontrar la forma de hacerlo. El escritor debe buscar un equilibrio, sin caer en la pacatería, la sensiblería y, lo más importante, el aburrimiento. Y no es fácil hallar ese equilibrio, teniendo en cuenta que los escritores somos todos unos desequilibrados.

Tic-Tac. Cuatro cuentos y un secreto es un relato que bascula entre lo real y lo fantástico ¿Era necesario este estilo para hablar a los más jóvenes sobre los conceptos que aborda la obra? ¿Hay huellas de la literatura o el cine  fantástico en Tic-Tac. Cuatro cuentos y un secreto?

di D. A.: Me resulta muy atractiva esa mezcla de realidad y fantasía, forzar la verosimilitud. Creo que lo hago en todos mis libros, ya sea exagerando elementos reales o introduciendo elementos fantásticos. El libro tiene cierto aire gótico, pero no quería que fuese oscuro, sino luminoso. En esto creo que las ilustraciones de Eugenia ayudan mucho. La huella más evidente es la de algunos cuentos de Oscar Wilde: esos hechos mágicos que se mezclan con el entorno urbano, ese ritmo pausado y al mismo tiempo seductor… Ojalá se me haya pegado algo de este maestro irlandés.

¿Qué es lo que más llamó tu atención sobre este proyecto, y con qué aspecto, ahora que su resultado está ya en librerías de toda España , estás más contenta?

eu E.A.: Lo que más me gustó desde el primer momento fue el tema  en sí y sobre todo la manera en que nos lo cuenta Diego. La primera vez que lo leí me emocioné mucho. Tengo que decir además que mi abuelo paterno era relojero y la historia me trajo bonitos recuerdos… También me fascinó el personaje de la niña Tic-Tac, la quise desde el primer momento. Quizás por eso uno de los aspectos que más me gustan viendo el libro en las mesas de las librerías es esa mirada tierna y a la vez cómplice que tiene la pequeña Tic-Tac en la cubierta. Creo que nos invita a descubrir esta preciosa historia, o al menos es lo que pretendí al dibujarla.

¿Por qué debería alguien comprar este libro y qué le hace diferente?

di D. A.: Ay, a mí es que me resulta muy difícil alabar mi propio trabajo… ¡Compren ustedes este libro por las ilustraciones de Eugenia! O mejor aún, ¡por el estupendo precio que le ha puesto la editorial!

eu E.A.: Entonces yo alabaré el texto de Diego. Son cuatro cuentos preciosos, que interesarán mucho al lector infantil, y que hablan del paso del tiempo de una forma emocionante y muy, muy original.

 

Parece que la LIJ está viviendo una buena época en España. Existen muchas editoriales que ya apuestan por el libro ilustrado y se publican verdaderas joyas en ediciones muy cuidadas y calculadas. ¿Cuál es el futuro del género? ¿Existen aún territorios en la LIJ por explorar o por mejorar?

di D. A.: Desde luego que hay mucha gente con mucho talento haciendo cosas maravillosas. Desde el punto de vista creativo vivimos un buen momento. El reto es que el brillo de esa creatividad tenga detrás una industria editorial estable. Si no, se corre el riesgo de, como en mis libros, movernos entre la realidad y la fantasía.

eu E.A.: Yo compatibilizo la ilustración con el trabajo en una librería. Cuando ves todo lo publicado, puedes tener la impresión de que todo ya ha sido explorado. Pero siempre surge un nuevo enfoque, un punto de vista diferente. Siempre hay agradables sorpresas.

¿Volveremos a disfrutar del combo Arboleda-Ábalos próximamente?

di D. A.: Sí, tenemos un nuevo proyecto entre manos. Hay que terminar de pulirlo y luego engañar a algún incauto para que nos lo publique.

eu E.A.: Algo estamos tramando…

 

 

Tic-Tac. Cuatro cuentos y un secreto ya está en las librerías españolas esperando que descubráis una historia que estamos seguros dejará poso en vuestra memoria lectora. si queréis tener más información acerca de este título no dudéis en contactar con nosotros en info@nostromocomunicacion.com.

Os animamos a que nos dejéis comentarios si ya lo habéis leído, y os despedimos con el book trailer del libro.

 

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